UGT Telefónica

Cuando parecía que la sangría de despidos no podía ir a peor, desde India nos llega un nuevo, y nefastos, record en volumen de despidos: 80.000 personas saldrán de la compañía estatal BSNL.

Se trata del mayor plan de reestructuración del empleo del que se tiene conocimiento, tanto en volumen como en porcentaje (el 50% de la plantilla actual).

Como siempre en estos casos, la medida se “justifica” en la mala marcha de la empresa, una compañía pública propiedad del Estado indio y que acumula unos resultados financieros deplorables, pero que deben ser matizados. BSNL (Bharat Sanchar Nigam Limited) es el mayor proveedor de telefonía fija y servicios de banda ancha, con más del 60% de cuota de mercado y el cuarto en el segmento de telefonía móvil, que le dota de una presencia y tamaño que no puede sustraerse del análisis. Además, su crecimiento no está para nada estancado. Sin ir más lejos, ha sumado 250.000 clientes sólo en el mes de junio.

Por tanto, estamos antes otro nuevo caso de mala gestión empresarial, a la que hay que sumar, en menor medida, el drástico aumento de la competencia local. Inversiones mal calibradas, tarifas desfasadas y su poco músculo para adaptarse a las necesidades de sus clientes han lastrado las cuentas de la compañía hasta el punto de verse amenazada por sus proveedores ante los impagos.

El argumento esgrimido por la empresa, tan socorrido como falaz, para “explicar” esta medida, es que “el 75% de los costes de la compañía son laborales”, pero hurtando de esta sentencia todo lo referido a la incapacidad de los gestores de la compañía en términos de retorno y eficacia de las inversiones, estrategia competitiva y capacidad de liderazgo.

La empresa se ha comprometido a efectuar estos recortes bajo supuestos de voluntariedad, aunque su propuesta, a la hora de cerrar estas líneas, no se ha concretado.

Con esta medida, el número de despidos mundiales se eleva a la astronómica e inconcebible cifra de 155.000 despidos en prácticamente un año. Sin duda, algo debe cambiar en nuestro Sector, porque esta situación es del todo insostenible.

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